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Esta ley establece las condiciones y requisitos para el transporte y la liberación de animales salvajes en Colombia con el fin de reducir el estrés y el sufrimiento de los animales que han sido rescatados o confiscados. Reconoce la importancia del bienestar animal y señala que los animales silvestres deben ser tratados como animales sintientes y, por lo tanto, deben ser tratados con respeto.
Esta ley garantiza la seguridad física y psicológica de los animales mediante la aplicación de requisitos relativos a los contenedores, la temperatura, el ambiente, la velocidad de los vehículos, etc. durante el transporte.
Especifica además que los animales jóvenes requieren una atención especial debido a su especial susceptibilidad a sufrir daños.
La ley exige que, siempre que sea posible, los animales sean transportados en zonas de pasajeros, en lugar de en bodegas de carga, y que quienes los transporten estén formados para ello.
También establece una clara distinción entre animales salvajes y animales de compañía en lo que respecta al tratamiento sanitario, la vacunación y la legislación pertinente sobre animales de compañía.
Por último, el proyecto de ley establece sanciones para quienes no manipulen y transporten animales salvajes de acuerdo con las normas mencionadas.